¿Cómo se pretende masificar cuando se cobra hasta tres veces más de anualidad a alguien que ni siquiera tiene acceso a un campo de golf?
Opinión.– La reciente Copa Los Andes de noviembre se presentó como un espejismo encantador, ofreciendo una visión tentadora de lo que muchos desearíamos ver en los torneos amateur de golf. Lamentablemente, este evento no refleja la realidad; es hora de abrir los ojos y comprender a fondo la verdadera situación.
¿Es acaso momento de admitir que debemos decirle adiós al golf elitista, y dar la bienvenida al golf social?
Para entender el origen de estos espejismos, es esencial abordar varios temas. Quizás el más crucial sea el ciclo de las juntas directivas tanto en la Federación Venezolana de Golf (FVG) como en los clubes. Estos ciclos pueden durar de 2 a 8 años, dependiendo de diversos factores. Sin embargo, la duración de estos periodos no implica necesariamente la implementación de un plan estratégico a nivel nacional. Más allá de los objetivos individuales de cada club, no se establece una planificación efectiva que aborde un norte común para el golf nacional.
Es crucial comprender que estas juntas directivas se deben principalmente a sus clubes y no al golf nacional en su conjunto. El papel de la FVG, la PGA, el Ministerio del Deporte, entre otros, es esencial para definir una visión integral para el golf en el país. Desafortunadamente, en estos ciclos, la falta de una planificación a corto, mediano y largo plazo ha llevado a una carencia de dirección estratégica.
Es hora de despertar y reconocer que la ilusión de la grandeza en el golf nacional solo puede superarse mediante un compromiso real con una planificación a largo plazo. La atención debe centrarse en establecer objetivos claros que trasciendan los intereses individuales de los clubes y se enfoquen en el desarrollo global del golf en Venezuela. Solo entonces podremos aspirar a una nueva era en la que el golf social tome la delantera, dejando atrás la sombra de un golf elitista que ya ha cumplido su ciclo, y que actualmente debido a lo arriba mencionado, la estadística refleja que actualmente esta muy limitado, sin esperanza a corto de plazo de ver mejorías significativas, sin transparencia publica, casi sin futuro.
Es esencial señalar que, a lo largo de su historia, Venezuela nunca ha implementado una política de masificación nacional en el golf. En muy pocos periodos se ha diseñado un plan decente para el alto rendimiento y una sede nacional. La última década, marcada por la crisis, el éxodo, constantes egos y disputas internas, ha impedido avanzar. Aquellos con cargos destacados deben ser políticamente correctos, representando a sus clubes e instituciones como si viviéramos en la época medieval o en Game of Thrones. Compiten por cargos, y cada estrategia o decisión puede influir en la posibilidad de ser electos. Actualmente, el golf nacional está manejado por una cofradía, pero ¿es culpa de los presidentes actuales la crisis del golf? NO. Siguen pasos similares a sus predecesores, respondiendo a lo que la sociedad interna de cada club les demanda.
Llegamos al punto en el que la Federación Venezolana de Golf (FVG) o la PGA deberían intervenir. Hasta cierto punto, han propuesto soluciones, aunque limitadas. A partir de ahí, enfrentamos la triste realidad de la necesidad económica, especialmente en el caso de la FVG, con cada vez menos inscritos, bajas anualidades y altas inscripciones en torneos. Este enfoque resulta contraproducente; por un lado, la FVG recoge pocos ingresos, y por otro, el costo de inscripción a los torneos federativos es excesivamente alto, chocando con el objetivo de masificar el golf en Venezuela.
Es necesario considerar el promedio de inscritos por torneo en comparación con los torneos sociales. La falta de incentivos y una campaña pública adecuada empeorarán la situación, a menos que aparezcan giras de torneos privados en clubes, con duraciones más cortas y costos más bajos, solicitando el aval en categorías específicas para aumentar la participación, patrocinios, etc. Este es un tema complejo que requiere una profunda revisión y acción.
¿Política de masificación efectiva?
En Venezuela, la anualidad, según diversas redes sociales de clubes oficiales, se proyecta alcanzar entre 45 y 65 dólares en 2024, un aumento modesto y muy por debajo de la inflación anual. Este incremento, más que un enfoque económico coherente con los objetivos de otros países suramericanos, parece reflejar un populismo, revelando un compromiso mayor con mantener capital político que con una gestión económica consistente y efectiva.
Es preocupante observar que, aunque se menciona públicamente el deseo de masificar el deporte, la anualidad para un golfista no miembro de club asciende a 150$, casi 2-3 veces la tarifa para un socio de club. ¿Cómo se pretende masificar cuando se cobra hasta tres veces más a alguien que ni siquiera tiene acceso a un campo de golf? Este enfoque contradice la verdadera esencia de la masificación.
En el pasado, al recibir el Botón de Oro de la FVG de manos del Presidente , el Ing. Rafael Barrios de Jongh, y en mi corto discurso que pueden ver en youtube Xocial Stream, expresé públicamente nuestro compromiso continuo de documentar la realidad del golf venezolano. Nadie viaja, documenta o conoce más que nosotros, sonara pedante, pero es tan sencillo como que a través de Notitarde y Xocial Stream, exploramos la realidad de cada región ya para casi 5 años viajando,conociendo academia, casa caddie y clubes. Puede ser difícil para los líderes actuales entender que no son los únicos responsables, pero sí son parte del problema, por ahora…
Mientras persista la mentalidad colectiva de conformarse con un golf social mediocre, veremos una disminución en la participación, la falta de nuevos campos y la ausencia de un programa de alto rendimiento digno. Mientras tanto, continuaremos realizando donativos de la mano de Ameripack, brindando soluciones a los caddies y escuelas de golf menor que enfrentan desafíos, a menudo ignorados por muchos o decepcionados con falsas promesas, pues estamos informados de todo lo que ocurre a nivel nacional, es nuestro rol como prensa informar la realidad, no la que unos u otras quieran que pintemos.
Para buscar culpables, basta solo un espejo.
Mientras no se promueva públicamente una política a mediano y largo plazo desde los clubes y la Federación Venezolana de Golf (FVG), el ente más importante en Venezuela, no podemos esperar el surgimiento de nuevos talentos como Johnny Vegas en un futuro cercano. La falta de incentivos para traer profesores extranjeros y actualizar a caddies e instructores dentro de los clubes resulta en tarifas extremas, de 5 a 10 dólares la hora a 70-90 dólares la hora, reflejando el valor real de un coach.
Es esencial promover el golf en las escuelas públicas y privadas, así como en las universidades de todo el país. La realidad actual demuestra que la falta de enfoque en estos aspectos afecta directamente la posibilidad de sumar de estratos, altos, medios y hasta bajos, o me van a decir que Amauriel Fernandez no tuvo una buena carrera como amateur, y ahora es profesional. La dependencia del juego de “quítate tú para ponerme yo” y la falta de apoyo debido a caídas de popularidad personal son obstáculos que impiden el desarrollo del golf en Venezuela,aquí si quiero dejar claro, que nos quejamos de lo que ocurre fuera de los clubes, pero en muchos aspectos, algunos de estos clubes, y hasta instituciones siguen pasos similares…
Mientras tanto, el país se ahoga en pésimos resultados, dependiendo de unos pocos golfistas destacados como Virgilio Paz, Vanesa Gilly, Merchy Tablante o Andrés Martínez. Si este mensaje resulta ofensivo para algunos, especialmente aquellos que han hecho esfuerzos genuinos por sincerar la realidad de sus clubes o regiones, no va dirigido a ustedes. Sin embargo, aquellos que priorizan la conveniencia política sobre el bienestar colectivo no forman parte de la solución en este momento.
Calendario repleto… de WAGR
Recientemente, la Federación Venezolana de Golf (FVG) publicó el calendario para el año 2024, y aunque es alentador ver un calendario lleno de eventos, surge la preocupación de que otorgar tantos puntos al World Amateur Golf Ranking (WAGR) de manera tan exagerada aumentará considerablemente la
mediocridad del golf nacional.
El WAGR, aunque es una herramienta de promoción, debería utilizarse con mérito y cumpliendo con requisitos mínimos. Llenar el field de damas generales 1era y campeonato no debería sumar puntos, excepto en casos muy excepcionales. En el caso de los caballeros, solo unos pocos torneos deberían recibir puntos, ya que los puntajes dejan mucho que desear. Básicamente, estamos incorporando a jugadores al ranking sin considerar adecuadamente la calidad de los resultados, y cada vez menos entrenadores en Estados Unidos respetan el sistema debido a la forma en que se otorgan puntos en países en desarrollo o de tercer mundo, como es nuestro caso.
Estar en el WAGR debería ser un privilegio reservado para jugadores scratch o cerca de ese nivel. En torneos, he recibido preguntas de padres sobre por qué no destacamos ciertos eventos en medios de comunicación que manejamos, y la respuesta es simple: pocos lo merecen. Estar en un ranking internacional debería ser un honor y un privilegio, además es bueno dejar claro que la beca deportiva que muchos persiguen no depende en lo absoluto del WAGR, sino de los méritos individuales como los scores, la capacidad económica, la mentalidad ganadora, el manejo de la presión, la estrategia de juego y la consistencia.
Los precios elevados de inscripción y la duración de tres días de los torneos hacen que participar en el calendario de golf nacional, con un mínimo de seis torneos para que sea válido el periodo/ranking anual, resulte en costos que oscilan entre 2 mil y 20 mil dólares, dependiendo de la ubicación / torneos y la cantidad de personas con las que se viaje. Esto representa solo el costo logístico y plantea desafíos adicionales para la participación individual – general. Jugar golf no es económico como Baseball, Basket o Futbol, pero actualmente el costo para viajar y participar en los torneos FVG es un exabrupto, le pido por favor a quienes lean esto que armen viajes grupales, en buses privados o vans, que viajen, estimulen la economía entre varios y ahorren costos en el proceso. Juntos todo es posible.
Que tengas muchas rondas con birdies y pocos bogeys, y que disfrutes del golf con tus familiares y amigos. Que nunca dejemos de luchar por un mejor país y que siempre salgamos al campo con buena voluntad. Si quieres contactarme puedes hacerlo al correo [email protected]
Frank Wadskier Stefani @wadskierphoto / @frankwadskiersports
Director Xocial Stream Botón de Oro FVG 2023